El arquitecto Boris Szélpal del estudio Felber Szélpal Architects ha diseñado la Szelpal House, una rotunda y moderna casa familiar situada en Solothurn, Suiza. Bella, sencilla e incluso austera, los arquitectos han apuesto por una innovadora vivienda contemporánea, muy distinta de las tradicionales casas de montaña de esta zona alpina.
El edificio, un volumen ortogonal monolítico de hormigón visto, resulta rotundo e incluso duro en su exterior, aunque flexible y acogedor en su interior. Dotado de un excelente aislamiento, puede adaptarse de manera económica y sencilla a las necesidades, siempre cambiantes, de una familia.
La casa se ha introducido en el paisaje evitando grandes alteraciones en el terreno. Rodeada de plantas, flores y árboles propone un contraste poderoso entre arquitectura y naturaleza.
La construcción está situada en una propiedad de forma alargada y de topografía descendente, lo que ha repercutido de manera directa en su concepción arquitectónica. Al desarrollarse sobre una superficie inclinada, los arquitectos han creado una distribución de dos plantas que sigue la pendiente. Su sección tiene forma de “S”: en el extremo este la entrada da acceso directo a la planta baja, mientras que en el oeste, una terraza abierta se comunica con el jardín mediante unas escaleras.
Desde el piso superior, que cuenta con una amplia superficie de paredes acristaladas, es posible disfrutar de una magnífica panorámica de los Alpes. Llena de luz, en esta planta es donde se han situado las habitaciones principales, prácticamente todas orientadas hacia las montañas. Mobiliario integrado de colores neutros, pocas piezas extentas, y un espacio abierto que une comedor salón y cocina, le dan al espacio un marcado caracter contemporáneo.
En la planta baja, con peores vistas al paisaje, se han dejado el acceso de entrada, el garaje y las zonas auxiliares como el despacho, y la bodega.
Fotografías © Bruno Helbling, Zürich
