Suecia y el alcohol tienen una relación, digámosle, especial. Por eso una de las estrellas de su capital es el Spritmuseum, el museo del alcohol que ocupa dos antiguos almacenes navales de la isla de Djurgården, y que ahora acoge una exposición en la que la protagonista es la segunda bebida más consumida en el mundo: la cerveza.
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La exhibición diseñada por el estudio de diseño Form Us With Love celebra la ciencia y el arte de hacer cerveza, respondiendo así al creciente número de conocedores, apasionados creadores y fans de la bebida de cebada en general.
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La cerveza no es sólo cerveza y el fabricante de cerveza no es un simple fabricante de bebidas. Ahora los bebedores de cerveza son verdaderos amantes, y las pintas corrientes y molientes, anónimas, han de enfrentarse a una dura competencia. El entusiasmo por la elaboración de la cerveza artesanal a pequeña escala está floreciendo al mismo tiempo que el lúpulo. Los fans de la cerveza son legión. Así que, ¿cómo no celebrarlo con una exposición?
Inspirados por los laboratorios y talleres, FUWL ha tratado de hacer que la audiencia investigue y se involucre en el proceso de encontrar fórmulas que conviertan a la cerveza en un éxito. «Hemos querido ilustrar las diferentes dimensiones de observación y experimentación, combinando materiales clínicos con focos que conviertan cada muestra en protagonista de un escenario imaginado», explican John Löfgren, Jonas Pettersson y Petrus Palmer, cabezas visibles del estudio sueco.
¿Y cuál es el objetivo del entorno? Convertirlo en una exposición educativa, en la que la curiosidad se desarrolle: toca oler, sentir, y distinguir ingredientes y métodos que permitan reformular las recetas clásicas.
El diseño gráfico es obra de Böfüms, y la fotografía de Jonas Lindström.
